martes, 7 de abril de 2015

diseños 2015

Luego de arduo trabajo de introspección tan profundo que por momentos parecía eterno ya están aquí los nuevos diseños del taller de las calacas: los muñecos de la línea MONOLITO, cuyos  primeros y primeras representantes son la pareja  DyF, pequeñas, compactas y con aroma a especias. Pintadas a mano por la artista Alicia Soto son piezas únicas por ser hechas una a una y firmadas, Retomando la tradición de las muñecas de trapo de las abuelas y enriquecidas con diseño contemporáneo y trabajo estético que dan por resultado un objeto de arte, entrañable y hermoso.

 DyF representan el Ícono de la Cultura y el arte que se vuelve popular al ser reconocido en infinitas versiones de un país ávido de símbolos mediáticos, y a la vez fiel a la profundidad de su universo creativo, rústico y complejo. 

viernes, 28 de febrero de 2014

OBRA NUEVA

Algo de lo último que he pintado, en esta nueva etapa en la que estoy acercandome a mí y a mis deseos 

en el jardín del arte de San Angel

una elegante calavera sobre papel kraft




en plena labor


martes, 4 de febrero de 2014

DE LAS BATALLAS Y DE LOS DESIERTOS
Si bien yo nunca me he considerado una gran lectora, más por falta de medios que por falta de ganas, si hay unos cuantos escritores que han sido en mi vida faros y puertos para la imaginación y que al paso de los años se hicieron polvo o capsulas del tiempo que al abrirlas me bañaban de luz y risas o en algunos momentos de oscuridad y muerte, eso me pasa con José Emilio Pacheco y sus historias que solo con la sonoridad del título me devuelven  fragmentos de olores, colores modos de ver y ser que no son más y duele la simpleza del pasado que atormentó mis años adolescentes, la pureza de las palabras que se vuelven imágenes. Sería pretencioso enumerar su obra, y no voy a hacerlo porque ni siquiera recuerdo claramente las historias solo fragmentos de imágenes y ello es aún mejor que saberlo de memoria, nunca lo correteé para que me firmara nada, ni seguí su vida ni desmenucé sus motivos ni los míos, no conocí de él nada más que lo que leí y olvidé y ahora cuando escucho los títulos de sus historias siento el aguijón de la nostalgia por un tiempo en el que fuí semilla y me regó ese mar que me salía al encuentro por todas partes....